Gregorio Manzano, o pera de agua como dice mi amigo Hilario, vino al Sevilla después de muy pocas jornadas para colocar al Sevilla donde (por mucho que diga Del Nido) nos merecemos.
Esta claro que no ha sido capaz.
Lo que si ha sido capaz, es de haber conseguido hacer historia en el club.
Mira que hemos tenido jugadores malos, entrenadores malos.
Mira que hemos pasado calamidades, sin tener para pagar la luz y teniendo que recurrir a jugadores casi retirados o lo que hubiese en el filial.
Nadie. Ni jugando con Linde, Cantudo, Cordón, o Marinaquis, Diosdado o Tabaré.
Ni cuando nos han entrenado técnicos como, Castro Santo, Miera, Toni, Camacho o Marcos. Nunca, nos habían metido en nuestro Estadio media docena de goles.
Nunca, a pesar de los malos momentos que nos ha tocado vivir, había sentido tanta vergüenza en mi propia casa.
Nunca me había marchado del estadio en el descanso.
Hasta hoy.
Ha tenido que venir Gregorio Manzano para que la temporada con mayor presupuesto de la historia del club, haya hecho historia por haber conseguido la más grande humillación que los sevillistas hemos sufridos en ciento cinco años de historia.
Yo quisiera saber, para que aparte de venir muy broceado, te llevaste tres días a Costa ballena al equipo.
Para luego hacer el ridículo más grande de la historia del club.
El partido estaba claro que era muy difícil de solventar. Había bajas muy importantes y nos visitaban la Central Lechera, que aparte de llorones son un gran equipo.
Y es, ante la adversidad, cuando se ven los buenos entrenadores.
Si el que tienes es muy malo, te meten tres.
Si tienes a Gregorio Manzano, te llevas media docena.
Los errores de la Pera de agua.
· El más importante, poner en la zona de creación a Medel y Zokora juntos.
Quien de los dos se ofrece para comenzar una jugada y cómo llega el balón a los delanteros.
· Colocar a Capel en la derecha.
Cuantas veces le tiene que demostrar que jugando en la derecha jugamos con uno menos.
· Aguantarle todo el partido a Sergio Sánchez.
Cualquier entrenador medianamente coherente retira del campo a la media hora a un jugador que se toma el partido como el de un patio de colegio.
· No reacciona ante lo que es obvio.
Después de jugar la peor primera parte de la historia y lograr avergonzar a todo el Sevillismo, Manzano parece que no le disgusta demasiado el equipo y sale la segunda parte con los mismos.
En resumen, día muy triste para todos los sevillistas.
Ha llegado un equipo al Sánchez Pizjuan, se han puesto a jugar una pachanguita y nos han ridiculizado ante la vista de toda España, metiéndonos media docena de goles.
Y manos mal, porque a la media hora pensé que podíamos entrar en el libro de los guinnes.