16.1.10

BARCELONA - SEVILLA

El Sevilla fue goleado en el Nou Camp. Manolo Jiménez sabiendo que era muy difícil sacar puntos de Barcelona decidió pensar más en la eliminatoria de copa y tiro literalmente el partido.
Sacó un equipo plagado de suplentes de los suplentes y se encomendó a la suerte y a Palop para no perder por una goleada histórica. Y la verdad que solo se quedó en goleada porque el Barcelona tardó 50 minutos en meter el primero, pues si se pone pronto por delante posiblemente hoy estuviéramos hablando de un día muy negro para el sevilismo.
Aun estando de acuerdo en la idea de reservar jugadores en este partido, no lo puedo estar con la elección elegida. Se puede refrescar el equipo y ponerle al Barcelona un equipo de mucha más garantía, porque si no, te puedes exponer a salir en todos los diarios deportivos de Europa.
El equipo salió al campo con la única idea de defender todos detrás del balón y dejar que pasaran los minutos. Durante la primera parte se pudo conseguir el propósito de no haber encajado ningún gol, gracias a que en cada jugada de ataque del Barcelona se defendía con todo el equipo, haciendo un gran desgaste y en última instancia estaba un acertadísimo Palop. Pero lo lógico era que más tarde o más temprano el gol llegara. Y lo hizo en una jugada desgraciada de Escude marcando en propia puerta, pero la forma era lo de menos, de alguna manera tenía que llegar. El hecho de saber que se había desvanecido la posibilidad del empate, hizo que se bajara la intensidad defensiva y a la media hora del segundo tiempo llegaría el segundo gol. A esa altura del partido, después de llevarse más de una hora detrás de los jugadores del Barcelona las fuerzas escaseaban, pero a falta de cinco minutos se acabó la reserva y el Sevilla se quedo sin una gota de gasolina, lo que aprovecharon para meter dos goles más y menos mal que ya no hubo tiempo para más.
Pero ojo. No nos olvidemos, este no es nuestro Sevilla.