He desayunado hoy con la noticia de que hemos pagado siete millones de euros por Luis Fabiano.
No sé muy bien si es una buena o mala noticia. Si es una buena operación, o no.
Sí hay varias cosas que están claras.
La primera, que el jugador ha sido muy rentable a pesar del costo de la operación (10 millones)
Estamos hablando del mejor delantero centro que yo al menos he disfrutado con la camiseta del Sevilla.
La segunda que ha dejado de ser el segundo gran pelotazo económico para pasar a ser una buena operación.
El origen de cambio de la valoración económica de la operación, parece ser un gol por la escuadra que el grupo Rio con la colaboración del Milán le metió al Sevilla hace dos verano.
El Sevilla no tendría que haber pagado ni un solo euro si el Milán no hace esa oferta negociada con el grupo Rio de 13 millones de €.
Pero con esa oferta los dichosos Rio se aseguraban recuperar con intereses lo que había invertido en su día por el jugador, porque el Sevilla por contrato estaba obligado a la venta.
De ahí la denuncia y de ahí el cobro de los siete millones por retirarla.
Lo que también parece claro es que la tan desmentida clausula de 11 millones tenía mucho de ser cierta.
Me da que en este caso se han dicho muchas mentiras.
Ahora será el Sevilla quien quiera recuperar el dinero. Aunque si espera de Brasil 10 millones de €, más vale que vaya convenciendo al jugador que le quedan dos años más en el Sevilla, que por otra parte es lo que a mí me gustaría.
