El Costa Marfileño Romaric es desde hoy nuevo jugador del Sevilla. Ha costado nueve millones de euros y ha firmado por cinco años. Copio y pego la opinión de Julian Ross, de su blog “de donde ha salido.”Lo mejor.
Su mejor virtud es, obviamente, su fortaleza, pero es mucho más que un simple medio defensivo... tiene un fuerte golpeo de balón desde media distancia y la calidad suficiente como para desbordar en la banda o sorprender en sus subidas al ataque desde la medular. Todo ello sumado a su polivalencia hace de él un jugador muy interesante.
Lo menos bueno.
Romaric viene al Sevilla para suplir a Keita, y se trata de un jugador completamente distinto, que pese a ser más fuerte y peligroso en sus subidas desde segunda línea no puede igualar al jugador del Barça en resistencia, regularidad o recuperaciones. Puede pasar desapercibido si se le utiliza para tareas defensivas.
Su mayor afición es hacerse jardines en su cabeza.
Esa es la opinión de Julián, la mía...
Yo al igual que con las inversiones de Chevanton, Mosquera y koné, veo unas inversiones súper millonarias (40 millones euros) que creo que el Sevilla no debería de permitirse en jugadores suplentes, ya que son futbolista que en principio no superan a los titulares de la plantilla. Está claro que la fórmula empleada por el club para las contrataciones ha cambiado, supongo porque ya no podemos utilizar el factor sorpresa, y los clubes al que se dirige el Sevilla, saben de sus anteriores operaciones y de la buena economía que disponemos (a ver cuánto nos dura) son facturas que hay que pagar cuando el equipo supera la mediocridad, para integrarse en los poderosos de Europa.
Lo que si entiendo, es que para incorporar a jugadores que superen a los teóricos titulares del Sevilla, debe de ser una tarea alta complicada y sobre todo carísima, teniendo en cuenta el costo de los jugadores incorporados estas dos últimas temporadas, que exceptuando a Keita, no han mejorado lo que ya había, aunque si la calidad media de la plantilla, pero hay que analizar si merece la pena el grandísimo esfuerzo económico que está realizando el club.
A lo mejor si gastáramos menos millones en incorporar a nuevos jugadores y se pagara más a los que ya tenemos, quizás Alves hubiera seguido con nosotros y tampoco nos hubiera utilizado alguno como trampolín para irse a otro sitio donde le pagan el triple.
