Como era de esperar volvimos de vacio del Bernabéu, y es que por muy buenos jugadores que tengamos, teniendo la peor defensa de la liga, es muy difícil sacar algo de Madrid, se que soy muy reiterativo con la defensa, pero partido tras partidos se confirma la fragilidad que tenemos detrás, tenemos que meter tres o cuatro goles para poder ganar un partido. Es verdad que nadie tiene culpa de las lesiones de Javi Navarro, Dragutinovic y Escude, pero si la tiene de no utilizar a un central buenísimo como Fazio, con 1’90 de altura y que va para figura, y preferir a los centrales del filial Lolo y Prieto, que a decir verdad, acabaran jugando en el jerez o en el Córdoba y también de seguir contando con el lamentable Mosquera,(este acabara jugando en las Plumas de Barranquilla) el que toma esas inexplicables decisiones es Manolo Jiménez, nuestro entrenador hasta el final de temporada (ya queda menos) y otro que también tiene mucha culpa es Monchi y su nefasto escudero que se ha buscado, Víctor Orta. Sabiendo desde hace ya muchos meses que Mosquera es muy malo, que Javi Navarro no va a jugar, ni Boularouz tampoco (esto es digno de comentario aparte) ¿por que coño no se ha hecho algo en Diciembre? Por eso pienso, que a pesar de las lesiones si hay culpables. Dos. Jiménez y Monchi.
El partido.
El Sevilla salió bien, a los cinco minutos ya dispusimos de dos ocasiones de gol, pero el partido empezó a no gustarle al arbitro y a los siete minutos, en una leve falta de Crespo, Teixeira acondiciona el juego del lateral enseñándole una injusta tarjeta, con noventa minutos que había por delante, estaba claro que a las primeras de cambio lo echaba, (Jiménez lo cambio a los veinte minutos), no quedándose conforme, acondiciona también el resultado pues la falta acaba en gol, en un clarísimo fuera de juego de al menos dos jugadores madridistas. El Sevilla busca igualar el ilegal gol madridista y con muchísimo trabajo lo consigue Kanoute, pero a la primera llegada del Madrid, se vuelven a poner por delante, otro balón al centro que Raúl controla, retiene, se da la vuelta y marca.
La segunda parte volvió a salir el Sevilla enchufado, moviendo el balón y acercándose a Casilla. Pero la verdad es, que cada vez que se acercaba el Madrid era medio gol, la poca contundencia atrás y el árbitro vestido de Madridista, terminó por desconectar al equipo del partido. El tercero llegó en una jugada de Guti por la banda derecha que mete al centro del área, y ahí estaba el delantero solo para empujar a la red, con los dos centrales marcándole a un metro por delante, descolocados como siempre. Y es que lo que no puede ser, no puede ser.
No me gustaron, En primer lugar Jimenez, por la eleccion de los dos centrales. Alves, no sabia a que jugaba, ni donde jugaba. David Prieto, el pobre estaba deseando que acabara el partido, mira que hacerlo debutar este año, en el Bernabéu y con Mosquera de compañero de línea. Mosquera, deambulando por los alrededores del área haber si se encuentra un balón. Poulsen, dicen que es seguro que se va al final de temporada, ¿no se habrá ido ya? Capel, su peor partido de sevillista. Navas, una jugadita y se acabó. Luis Fabiano, como dicen por ahí, hizo la guerra por su cuenta. Koné, nada de nada.
Me gustaron, la primera parte de Kanoute. Palop, que si no es por el nos meten cinco. Y Keita, partidazo el suyo, ha estado espectacular, sin duda el mejor de los 27 jugadores que saltaron al campo.
