La afición del Sevilla está en un periodo muy alto de crispación y de
reivindicaciones debido al fracaso que ha tenido el equipo en esta
temporada.
El primero en una década.
Lo voy a volver a repetir. El primero en una década.
Escucho, leo y veo, que parece que parte de la afición está harta y que pide la limpieza total desde el palco hasta la plantilla.
Como diría mi amigo Leiva, vamos a echar el balón abajo.
Mi opinión, que no tiene porque ser la más coherente, ni la más acertada y bien pudiera ser todo lo contrario, es que hay que analizar las cosas con frialdad e intentar actuar de la manera más razonable posible y no dejarse llevar por el desanimo y la desilusión.
Durante esta aciaga temporada siempre he tenido la impresión, que dejando aparte los dos imperios económicos que no compiten con nosotros, el Sevilla, junto al Atlético y el Valencia son una de las tres mejores plantillas de la liga.
Un equipo que por diferentes circunstancias no ha cumplido con los objetivos marcados por el costo alto de la plantilla, que posee 16 jugadores internacionales.
Todas las temporadas hay diez o doce equipos que no cumplen sus objetivos, y esta temporada nos ha tocado a nosotros.
Pero no creo que sea motivo para cambiar el club, como si fueran cromos de Panini.
Para cambiar parte importante de la plantilla hay que gastarse mucho dinero, que no se dispone, y tirar los activos del club.
El futbol está lleno de ejemplos que se puede revertir la situación, sin tener que estar haciendo revoluciones.
Lo que hay que pretender es valorar donde se ha fallado que no es difícil de averiguar y buscar soluciones sin arruinar el club.
Y lo mismo, con Del Nido, Monchi, Navas, Baba, Perotti, Campaña, Deivid, Palop, Guarente, Negredo, Reyes, Medel, etc, etc, etc. Nos vuelven a dar alegrías.
El primero en una década.
Lo voy a volver a repetir. El primero en una década.
Escucho, leo y veo, que parece que parte de la afición está harta y que pide la limpieza total desde el palco hasta la plantilla.
Como diría mi amigo Leiva, vamos a echar el balón abajo.
Mi opinión, que no tiene porque ser la más coherente, ni la más acertada y bien pudiera ser todo lo contrario, es que hay que analizar las cosas con frialdad e intentar actuar de la manera más razonable posible y no dejarse llevar por el desanimo y la desilusión.
Durante esta aciaga temporada siempre he tenido la impresión, que dejando aparte los dos imperios económicos que no compiten con nosotros, el Sevilla, junto al Atlético y el Valencia son una de las tres mejores plantillas de la liga.
Un equipo que por diferentes circunstancias no ha cumplido con los objetivos marcados por el costo alto de la plantilla, que posee 16 jugadores internacionales.
Todas las temporadas hay diez o doce equipos que no cumplen sus objetivos, y esta temporada nos ha tocado a nosotros.
Pero no creo que sea motivo para cambiar el club, como si fueran cromos de Panini.
Para cambiar parte importante de la plantilla hay que gastarse mucho dinero, que no se dispone, y tirar los activos del club.
El futbol está lleno de ejemplos que se puede revertir la situación, sin tener que estar haciendo revoluciones.
Lo que hay que pretender es valorar donde se ha fallado que no es difícil de averiguar y buscar soluciones sin arruinar el club.
Y lo mismo, con Del Nido, Monchi, Navas, Baba, Perotti, Campaña, Deivid, Palop, Guarente, Negredo, Reyes, Medel, etc, etc, etc. Nos vuelven a dar alegrías.