Ha vuelto el gran capitán.
Por su carisma, sus conocimientos, su experiencia y por su implicación en el club, se esperaba que uno de los jugadores más importantes e influyentes de la historia del club estuviera dentro del organigrama técnico del equipo. Parece ser que viene como apoyo a Antonio Álvarez, de tercer entrenador. Espero que no le pase igual que a Pablo Alfaro, que no supieron ubicarlo y sacarle todo el partido que pudiera tener.
Nunca podre olvidar que esta pareja de leones indomables (Pablo Alfaro y Javi Navarro) alentados, dirigidos, motivados y entrenados por Joaquín Caparros, fueron los principales causantes que se empezara a respetar como es debido a los jugadores del Sevilla en un terreno de juego.
Los tres han defendido mi escudo a muerte sin tener la necesidad de besarlo delante de las cámaras. Por lo que mi agradecimiento será eterno y siempre serán bienvenidos.