El Valladolid saca un
balón desde atrás con una pasmosa tranquilidad.
Desde el primer pase se ve que el Sevilla está totalmente
descolocado y sin tensión.
Se palpa el peligro.
A consecuencia de ello Navarro se pasa de frenada y permite al Valladolid ponerse por delante.
Se palpa el peligro.
A consecuencia de ello Navarro se pasa de frenada y permite al Valladolid ponerse por delante.
Buena forma de empezar un partido.
Los siguientes minutos no mejoran al primero. El motivo es una
defensa de risa y los demás sin enterarse de que el partido ya ha comenzado.
A los diez minutos en una desaplicación de Botía llega el
segundo. La tragedia estaba ya servida.
La caraja seguía y no llega el tercero de milagro.
Imperdonable la salida al campo del Sevilla.
La caraja seguía y no llega el tercero de milagro.
Imperdonable la salida al campo del Sevilla.
Al igual que en Madrid la situación requería cuanto menos decisiones
brillantes desde el banquillo.
Pero lo que llegó fue todo lo contrario. Lo mismo que pasó
en Madrid.
Perdiendo cero dos, cambiar a un lateral ofensivo para colocar
a Cala, y poner a Maduro en el lugar de Cala, y dejar en campo al desastroso
Botia no es una decisión brillante, sino todo lo contrario.
A pesar de eso, un gol en propia puerta cuando quedaba toda
la segunda parte y la movilidad de Navas, Rabello, Reyes y Perotti permitieron
pensar en la remontada, o al menos en la igualada.
Pero Michel iba a cometer otro grave error.
Maduro se
lesiona. El árbitro con la mano
calentita. Y Medel con tarjeta.
El madrileño no se le ocurre otra cosa que retrasar
al chileno y echarlo a los leones para que sea él el que tenga que parar los
contragolpes que a buen seguro iban a parecer.
En el primer contragolpe Medel hace falta y se va a la
calle.
¿Quién no sabía que eso no iba ocurrir?
Mi hija que fue al partido, quizás algún guarda jurado y
Michel, (el entrenador del Sevilla)
Michel volvió a estar muy mal. Y eso que empezó bien con la
justa decisión de darle la titularidad a Diego López que actualmente da más garantía
que nuestro admirado Andrés Palop.
En cuanto al nivel ofrecido individualmente lo peor fueron
los defensas. Con una lamentable primera mitad de Botía que me recordó al Fazio
de Granada.
Creo que hoy en día Kondogbia e incluso Rabello deberían de
tener más minutos. Los que le sobran a Maduro por ejemplo.
El mejor como casi siempre Navas. Y buen partido de Reyes.
Ahora llegan momentos complicados. Estamos lejos de donde debemos
estar. No tanto como algunos piensa.
Yo, que estoy escribiendo desde la indignación, desde la
tristeza que da perder en tu estadio con el Valladolid, desde la amargura que me
trasmite ver a mi equipo el décimo primero.
Os digo que sigo confiando en este equipo. Y confió en estar
en Europa la temporada que viene.