Momento clave de la temporada y vuelve otra vez a las
andadas.
Emery vuelve a plantear un partido que solo tiene un camino,
perderlo. El rival ni siquiera se tuvo que emplear a fondo, no era necesario.
Nunca me indigné tanto antes de comenzar un partido y nunca lo
presencié con tanta tranquilidad. Pues el partido lo vi claramente perdido al
enterarme del entramado táctico tan lamentable con el que se ha presentado Unai
Emery.
Se presenta en San Mames con un centro del campo donde por
las características de sus jugadores no se genera futbol alguno. Son jugadores
todos de corte defensivo. El futbol lo deja todo en el banquillo, pero lo más
grave, es que con ese centro del campo decide poner dos delanteros. Para qué jugar con dos delanteros. ¿Cómo y quién le iba poner los balones a los
dos jugadores de arriba?
Si estaba claro que con ese centro del campo no se iba a
generar futbol de ataque, la opción de jugar con dos puntas ya se sabe que consecuencias
conlleva. Inferioridad en el centro del campo y dominio absoluto del rival. Ni
buenas opciones de ataque, y desequilibrio en defensa.
Si este planteamiento lo hace en Almería sería un error,
pero en casa del cuarto clasificado jugándote la clasificación de la champions es
inadmisible. Da lo mismo que el primer gol sea de patio de colegio o que
la expulsión de Diogo sea para analizarlo dentro del club (la segunda vez que le
pasa). El partido de una forma o de otra solo tenía un camino que lo había
trazado el señor Emery una hora antes del comienzo.
Una derrota que visto en las manos de quien estamos, a pesar
del buen resultado, me crea intranquilidad para el histórico partido de vuelta
en Valencia.