Esta el Sevilla en una fase que nos tiene a la expectativa para saber a dónde nos puede llevar este equipo.
Nadie me puede garantizar que no lucharemos para no tener problemas para mantenernos en la categoría. Al igual que muchos pensamos que podemos estar la temporada que viene en Europa e incluso en plazas champions.
A veces da síntomas de que miraremos para arriba y otras para abajo.
No dudo que hay más posibilidades para lo segundo que para lo primero, pero donde hay más papeletas de estar, es donde ahora estamos, en tierra de nadie.
El juego del Sevilla no está definido. El nivel del equipo tampoco. No soy pesimista, solo tengo muchas dudas de saber hacia dónde vamos a tirar.
Si lo miramos por el partido de hoy, sería fácil la respuesta. El Sevilla ha dado una impresión pésima.
No ha hecho absolutamente nada bien.
El equipo ni se ha defendido bien, ni ha creado juego, ni ha sabido atacar.
Los jugadores, unos regalando goles y otros fallando los goles que nos regalan.
Jugando de esta manera, o no los regalaban o se los metían ellos solitos como así ha sido.
Si analizamos brevemente la actuación del equipo no encontramos nada positivo
Cicinho fue desbordado con suma facilidad.
Botía jugó su peor partido. Esta vez quien salió en la foto en el segundo gol no fue Fazio.
Spahic también midió mal su salida en el fallo de Medel.
Medel estuvo desastroso, su peor partido como sevillista. Volvió a poner al equipo con el resultado en contra con otra de sus pérdidas en el centro del campo. Ni es la primera vez que le ocurre, ni la segunda, ni la tercera, Ni será la última.
Sorprende que jugara los 90 minutos.
Rakitic, el más entonado se encontró algo perdido. No sabía si su posición era detrás del delantero, en la izquierda o de medio centro. Quiso estar en los tres sitios y casi no estuvo en ninguno. No lo gestionó muy bien Michel.
Maduro parece que se ha desvanecido de su fulgurante entrada en el equipo. Lleva dos partidos pasando totalmente desapercibido.
En el futbol no basta con solo guardar la posición.
Con Del Moral en el campo parecía que se jugaba con uno menos y eso es un lastre muy grande para un equipo.
Baba dispuso de 30 minutos, tuvo dos ocasiones y las falló.
Perotti mal, Navas mal, Negredo mal.
El Sevilla mal.
