No es normal que el Sevilla no haya ganado este partido.
Es indudable que el equipo está mal, pero el resultado de
hoy es injusto.
Cierto que tampoco se ha tenido un aluvión de oportunidades,
pero se ha dominado el partido de cabo a rabo.
Jugando un partido mediocre el Sevilla ha sido infinitamente
superior al Slovan, que por otra parte tampoco es que tenga mucho mérito, pero
es que los checos se han acercado al área del Sevilla en una solo ocasión y le
ha servido para llevarse un empate que creo que ni ellos mismo aún se lo
creen, y es que el Sevilla está inmerso en una dinámica negativa que hay que
cambiar cuanto antes.
Y esa superioridad mostrada ha sido claramente manifiesta aun
siendo evidente que la mitad del equipo que hoy ha puesto en liza Emery no está
para optar a la titularidad. Al menos ahora. Y les pongo nombres: Reyes, F.
Navarro, Rabello, Cristóforo y Rusescu.
El partido también sirvió para confirmar lo que se le pudo
entrever entre líneas a Emery en sus declaraciones esta semana. El Sevilla dejará de ser un equipo suicida y a
partir de ahora se va a ver un equipo mucho más conservador. De hecho hoy en
casa frente al Slovan había en el campo más jugadores de corte defensivo que
cuando se jugó hace solo unos días en el mismísimo Santiago Bernabéu contra
las mega-estrellas Bale, Cristiano y compañía.
Una decisión lógica y reclamada por todos que aunque lo
normal es que mejore al equipo, lo cierto es que el daño ya está hecho y ni los
puntos volverán, ni la confianza de los jugadores es la idónea después de
tantos tropiezos.
El empate no es grave. El Sevilla salvo sorpresa se
clasificará para la siguiente ronda, pero la dinámica de resultados negativos
es preocupante. A ver como se desenvuelve el equipo en los próximos compromiso.
Emery tiene un tope para enderezar al equipo y está muy cercano. El derby.
Sino los mantecados se los comerá seguramente en Guipúzcoa.