Mientras espero qué Sevilla me va a presentar Monchi, me ha
llamado la atención una cuestión que no me ha gustado nada.
Es sabido el error que cometió el club por traerse un jugador
que a pesar de tener una calidad incuestionable supuso un gran fracaso deportivo
y económico porque el jugador tenía sobrepeso. Algo inadmisible en la elite del
futbol profesional. Me refiero a Romaric.
Pues llega a mis oídos de gente que lo ha visto que el rumano
Rusescu parece que se ha comido un caballo.
De hecho en el tiempo transcurrido desde su llegada a
Sevilla hasta los entrenamientos ya aparecía un cambio sustancial en su cara y
abdomen.
He intentado buscar fotos del jugador y la única que he
podido encontrar por mediación de un amigo del Twiter (Stukanute) solo hace
confirmar el lamentable físico con que se ha presentado el nuevo fichaje
sevillista.
Me parece increíble que un jugador que venga de una liga menor,
se presente ante su nuevo equipo (un equipo de prestigio) para jugar en la
mejor liga del mundo, de esa guisa.