Si el echo de tener un blog personal dedicado a mi equipo es sobre todo para exponer mis sensaciones u opiniones como sevillista, hoy voy plasmar lo que siento a día de hoy y desde hace algún tiempo atrás en cuanto a mis sensaciones después de que diversos acontecimiento y reacciones de los antes “admirados Biris” me han supuesto un cambio sustancial en mi manera de pensar de esta peña.
Ni que decir tiene que mi admiración por este grupo de SEVILLISTAS es por la ayuda incuestionable e incluso necesaria que durante muchos años ofrecen al equipo tanto en las épocas malas como en las buenas.
Para mi la peña Biri son el alma de mi segunda casa, el Ramón Sánchez Pizjuan.
O eran.
Como es lógico nunca he aprobado su faceta de violentos, pero siempre he pensado que muchos imbéciles anónimos se escudan en las masas para hacer golferías. Y me parece injusto enjuiciar a un grupo tan numeroso por unos pocos imbéciles.
Con lo cual mi admiración por ese tema no estaba cuestionada.
No me gustaba, pero podía mucho más las mil y una acciones de sevillismo de la mayoría de ellos.
Pero la verdad es que de un tiempo atrás paulatinamente se me ha ido diluyendo esa admiración.
Los Biris debido a que se ven como imprescindibles por su aporte en cuanto a la animación hacia el equipo, se han hecho fuertes. Se ven importantes.
Y lo utiliza.
Ahora con las redes sociales ese poder incluso lo ha multiplicado.
Ahora hacer campañas en contra de algo es más fácil.
A los típicos cánticos se le han sumado algún que otro blog, foros y rede sociales y lo utilizan para envenenar el ambiente ante algo o alguien que no les guste.
Primero se propusieron destruir al mejor presidente de la historia del Sevilla por no dejarlos que hicieran lo que le vinieran en gana.
En eso están, porque esa no es tarea fácil.
Ahora han comenzado la campaña contra Perotti, porque al jugador no se le ha ocurrido otra idea que recriminarle que le estuvieran pitando o que se yo, en la estúpida celebración del argentino en el penalti.
Y esa si es presa fácil. Tanto que pongo en duda la continuidad del jugador esta misma temporada, porque la campaña se las trae.
La verdad es que cada uno dentro de la legalidad puede hacer lo que le de la gana y también puede uno admirar a quien crea que lo merece. A mí con ese proceder por mucha ayuda que preste a mi equipo, la admiración por los Biris se me ha caido. Sencillamente porque no suelo llevar bien los temas que creo que perjudican al Sevilla FC. Y los Biris aunque siguen sumando, cada día restan más. Hasta al punto que dentro de poco estarán a cero.
Si no lo están ya.
